Càntir 2019

«El botijo me ha enseñado más a mi de lo que yo le pueda aportar. Hoy, más que nunca, es necesario que los objetos sean sostenibles. Es mejor ver un botijo roto que una botella de plástico abandonada. Por lo tanto, mi tarea como diseñador se ha reducido a procurar que su uso sea cómodo en la vida actual». Miguel Milá.

Desde hace tres años, el Museo del Càntir y los Amigos del Museo, editores del botijo, han encargado a un diseñador de prestigio la realización de una nueva pieza con la voluntad de que renueve el universo formal existente en el Museo.

Para la producción de la pieza se ha contado con un puñado de artesanos sin el cual no habría sido posible. Hecho artesanalmente de cerámica pisa esmaltada. El botijo es de edición limitada.

 





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